Fibroma acral ¿Qué es?

Fibroma acral ¿Qué es?

El fibroma acral es una masa benigna de tejido fibroso que aparece en la piel o en los tejidos subyacentes, especialmente en las áreas acrales del cuerpo, como las manos, los pies y los dedos. En el caso específico de la podología, se refiere a aquellos fibromas que se desarrollan en la planta del pie, en los dedos o en las áreas circundantes.

¿Qué es el fibroma acral?

Un fibroma acral es una lesión benigna que se forma por la proliferación excesiva de tejido fibroso. Este tejido fibroso se compone principalmente de colágeno, y el fibroma acral puede aparecer como una pequeña masa, nódulo o bulto que se siente firme al tacto. Aunque generalmente no es doloroso, en algunos casos puede generar molestias, especialmente si se encuentra en áreas de presión, como la planta del pie, lo que puede afectar la marcha o generar dolor al caminar.

¿Por qué sale un fibroma acral?

Las causas exactas del fibroma acral no siempre están claras, pero algunos factores que pueden influir en su desarrollo incluyen:

  1. Traumatismos o presión constante: La fricción o presión repetida sobre ciertas áreas de la piel, como en los pies, pueden contribuir a la formación de un fibroma acral. Esto es común en personas que usan zapatos ajustados o que están en constante movimiento.
  2. Predisposición genética: Algunas personas pueden tener una mayor predisposición genética a desarrollar fibromas acrales.
  3. Alteraciones en el tejido conectivo: El exceso de formación de colágeno en ciertas zonas del cuerpo puede ser un factor en la formación de estos fibromas.
  4. Factores hormonales: En algunos casos, los cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o la menopausia, pueden contribuir al desarrollo de estos tumores benignos.

¿Qué solución tiene?

El tratamiento del fibroma acral depende de su tamaño, localización y si está causando dolor o molestias. Las soluciones posibles incluyen:

  1. Observación: Si el fibroma acral no causa dolor ni molestias, en muchos casos, solo se recomienda observarlo con el tiempo para asegurarse de que no crezca ni cause complicaciones.
  2. Eliminación quirúrgica: Si el fibroma es doloroso, está creciendo, o afecta la función del pie, se puede realizar una extirpación quirúrgica para eliminar la masa. Esto generalmente se hace bajo anestesia local.
  3. Tratamientos tópicos o inyectables: En algunos casos, se pueden usar tratamientos como inyecciones de esteroides o crioterapia para reducir el tamaño del fibroma.
  4. Tratamiento ortopédico: Si la presión de los zapatos es un factor contribuyente, usar plantillas ortopédicas o zapatos más adecuados puede ayudar a reducir el dolor.

Es importante consultar con un podólogo si se sospecha de la presencia de un fibroma acral para determinar el mejor plan de tratamiento.

Centro de Podologia Las Ramblas.

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