Los podólogos están especialmente capacitados para tratar problemas relacionados con los pies, tobillos y estructuras relacionadas, pero su enfoque principal es el pie. Sin embargo, dado que los pies son una parte integral del sistema musculoesquelético y la postura del cuerpo, los problemas en los pies pueden afectar otras áreas del cuerpo, como las rodillas, las caderas y la espalda.
Dentro de sus funciones están:
- Análisis biomecánico: Evalúan la estructura y la función del pie y la pierna para diagnosticar problemas biomecánicos, como la pronación excesiva, la supinación o el pie plano. Utilizan herramientas como análisis de la marcha y estudios de presión plantar para comprender cómo se mueven los pacientes y cómo eso puede estar contribuyendo a sus problemas de pie.
- Tratamiento de lesiones deportivas: Pueden tratar lesiones comunes en deportistas, como esguinces de tobillo, fracturas por estrés, tendinitis y fascitis plantar. También pueden ofrecer asesoramiento sobre calzado deportivo adecuado, tratamiento con plantillas personalizadas del centro de podología las Ramblas y técnicas de prevención de lesiones.
- Atención a problemas dermatológicos y de uñas: Tratan afecciones cutáneas como callosidades, durezas, verrugas plantares, hongos en las uñas y otros problemas de la piel relacionados con los pies. También pueden realizar procedimientos como la eliminación de callosidades o el tratamiento de uñas encarnadas.
- Ortopedia podiátrica: Se especializan en el tratamiento de problemas del pie en niños, como pie plano, pie zambo y otras anomalías del desarrollo. Pueden recomendar dispositivos ortopédicos o terapia física para corregir problemas estructurales en crecimiento.
- Cirugía podológica: Algunos podólogos están capacitados para realizar procedimientos quirúrgicos menores en los pies, como la extirpación de juanetes, corrección de dedos en martillo o tratamiento de neuromas.
- Diabetes y cuidado de los pies: Los podólogos desempeñan un papel crucial en el cuidado de los pies en personas con diabetes, ya que pueden ayudar a prevenir complicaciones graves como úlceras, infecciones y amputaciones mediante la evaluación regular de la salud de los pies, el tratamiento de lesiones menores y el asesoramiento sobre cuidado preventivo.
En muchos casos, los podólogos trabajan en colaboración con otros profesionales de la salud, como fisioterapeutas, y médicos de atención primaria, para proporcionar un enfoque integral en el tratamiento de problemas relacionados con el pie y sus posibles repercusiones en otras partes del cuerpo.
Por ejemplo, un desequilibrio en la biomecánica del pie podría causar una marcha anormal, lo que a su vez podría provocar dolor de rodilla o de cadera. En estos casos, el podólogo podría realizar un estudio biomecánico de la pisada y trabajar en conjunto con un fisioterapeuta para desarrollar un plan de tratamiento que aborde tanto el problema del pie como sus efectos secundarios en otras áreas del cuerpo.
Aunque los podólogos no están específicamente capacitados para tratar problemas en otras partes del cuerpo más allá de los pies, su comprensión de la biomecánica y la estructura del pie puede contribuir significativamente a abordar problemas más amplios del sistema musculoesquelético. Si un podólogo determina que un problema está más allá de su alcance de práctica, es probable que refiera al paciente a un especialista adecuado para recibir tratamiento adicional.
En resumen, la profesión de la podología abarca una amplia variedad de servicios destinados a mantener la salud y el bienestar de los pies y las extremidades inferiores, desde el diagnóstico y tratamiento de problemas médicos hasta la prevención de lesiones y enfermedades.
Centro de podología las Ramblas.
